¿Cuáles son las razones por las que los encuestados confiesan haberse enrollado con alguien de su trabajo? Esto es lo que dice la encuesta:
1. Atracción por el compañero de aventura (59%): La chispa acumulada durante el año encuentra su momento perfecto.
2. Dejarse llevar por el ambiente festivo (52%): La energía de las celebraciones empuja a disfrutar el momento sin pensar en las consecuencias.
3. Insatisfacción con la relación de pareja (26%): Las tensiones en la relación se convierten en un detonante.
4. Demasiado alcohol (22%): Las inhibiciones caen y las decisiones impulsivas dominan, dando rienda suelta a todo lo que está contenido durante el día a día.
5. Soledad durante las vacaciones (12%): El deseo de conexión se intensifica durante esta temporada.
A todo esto habría que añadir otro factor tan poderoso como peligroso. “El morbo de estas situaciones hace que se desate una tormenta de adrenalina que engancha muchísimo”.
Lugares donde se desatan las pasiones
En este estudio de Ashley Madison se revela, además, cuáles son los lugares más comunes en los que se materializan estas aventuras, dependiendo de las circunstancias, el ardor o la premura del momento:
-Hoteles (25%): perfectos para quienes buscan la máxima privacidad.
-Casas (16%): escenarios para quienes disfrutan del riesgo.
-Coches (15%): un momento íntimo y fugaz antes de volver a casa.
-Oficinas (14,5%): donde las aventuras se concretan al día siguiente.
-Durante el evento (13,6%): para quienes no pueden esperar.
¿Quién es el amante ideal en la cena de empresa? La encuesta también revela patrones claros sobre las preferencias de los infieles:
-El 78% opta por un compañero de trabajo, aprovechando la cercanía y la confianza que genera el entorno laboral.
-El 39% confesó haber tenido una aventura con el cónyuge de alguien, llevando el riesgo y la adrenalina al siguiente nivel.
-El 24% admitió que fue con un jefe o un colega con un cargo superior, destacando la atracci